Los científicos han desarrollado un análisis de sangre revolucionario que es capaz de diagnosticar enfermedad de alzheimersegún una nueva papel publicado el 27 de diciembre en Cerebro.
Si bien las pruebas actuales implican exploraciones costosas o punciones lumbares dolorosas, “un análisis de sangre es más barato, más seguro y más fácil de administrar, y puede mejorar la confianza clínica en el diagnóstico de la enfermedad de Alzheimer y la selección de participantes para el ensayo clínico y el control de la enfermedad”. Profesor Thomas Karikari en la Universidad de Pittsburghquien participó en el estudio, dijo en un comunicado.
La enfermedad de Alzheimer es un trastorno neurodegenerativo progresivo que afecta la memoria, el pensamiento y el comportamiento. Es la causa más común de demencia en adultos mayores. La detección temprana de la enfermedad podría conducir a un tratamiento más temprano, lo que podría disminuir los efectos de deterioro.
Siga leyendo para descubrir cuándo la prueba podría estar disponible para usted.
Los tres principales marcadores de la enfermedad de Alzheimer son:
Placas amiloides: Estos son grupos anormales de fragmentos de proteínas que se acumulan entre las células nerviosas del cerebro.
Enredos neurofibrilares: Estos son hilos retorcidos de proteína que se acumulan dentro de las células nerviosas del cerebro.
Neurodegeneración: Esta es la pérdida de células nerviosas y conexiones en el cerebro, lo que conduce a la atrofia (encogimiento) del tejido cerebral.
Sin embargo, la presencia de estos marcadores por sí sola no es suficiente para diagnosticar la enfermedad de Alzheimer, ya que también se pueden encontrar en otras afecciones neurológicas. Un diagnóstico definitivo de la enfermedad de Alzheimer solo se puede hacer a través de una evaluación integral que incluye un historial médico completo, un examen físico y neurológico, y pruebas de laboratorio e imágenes.
El nuevo análisis de sangre podría omitir algunos de estos pasos. Esa sería una buena noticia para quienes desean evitar una punción lumbar, en la que se extrae una muestra de líquido cefalorraquídeo (LCR) de la parte inferior de la espalda. Y buenas noticias para aquellos que no pueden encontrar o pagar estas pruebas más costosas.
“Muchos pacientes, incluso en los EE. UU., no tienen acceso a los escáneres MRI y PET. La accesibilidad es un problema importante”, dijo el profesor Karikari.

La nueva prueba puede detectar un nuevo marcador de la neurodegeneración de la enfermedad de Alzheimer en una muestra de sangre. “El biomarcador, llamado ‘tau derivado del cerebro’ o BD-tau, supera las pruebas de diagnóstico de sangre actuales que se usan para detectar clínicamente la neurodegeneración relacionada con el Alzheimer. Es específico de la enfermedad de Alzheimer y se correlaciona bien con los biomarcadores de neurodegeneración de Alzheimer en el líquido cefalorraquídeo (LCR). ),” dice el universidad de pittsburgh.
“La utilidad más importante de los biomarcadores sanguíneos es mejorar la vida de las personas y mejorar la confianza clínica y la predicción del riesgo en el diagnóstico de la enfermedad de Alzheimer”, dijo Karikari.

La prueba aún se está estudiando para determinar su eficacia. “Karikari y su equipo planean realizar una validación clínica a gran escala de BD-tau en sangre en una amplia gama de grupos de investigación, incluidos aquellos que reclutan participantes de diversos orígenes raciales y étnicos, de clínicas de memoria y de la comunidad.
“Además, estos estudios incluirán a adultos mayores sin evidencia biológica de la enfermedad de Alzheimer, así como a aquellos en diferentes etapas de la enfermedad. Estos proyectos son cruciales para garantizar que los resultados de los biomarcadores se puedan generalizar a personas de todos los orígenes y allanarán el camino hacer que BD-tau esté disponible comercialmente para un uso clínico y pronóstico generalizado”, dice la Universidad de Pittsburgh.

Hay varias señales de advertencia de la enfermedad de Alzheimer que pueden indicar que una persona está experimentando un deterioro cognitivo. Estos signos pueden incluir:
Pérdida de memoria: Dificultad para recordar información aprendida recientemente o hacer repetidamente las mismas preguntas.
Dificultad para completar tareas familiares: Lucha para planificar o completar las tareas cotidianas, como vestirse o preparar una comida.
desorientación: Perderse en lugares familiares u olvidar la fecha o la estación.
Dificultad para comunicarse: Tener dificultades para encontrar las palabras correctas o tener dificultades para seguir o unirse a una conversación.
Falta de criterio: Tomar malas decisiones o exhibir un comportamiento imprudente.
Retiro de las actividades sociales.: Pérdida de interés en pasatiempos, actividades sociales o cuidado personal.
Cambios en el estado de ánimo o el comportamiento: Experimentar cambios de humor repentinos o comportarse fuera de lugar.

Si bien no existe una forma segura de prevenir la enfermedad de Alzheimer, hay pasos que puede seguir para reducir el riesgo de desarrollar la enfermedad. Aquí hay algunos consejos para prevenir la enfermedad de Alzheimer:
Hacer ejercicio regularmente: Se ha demostrado que la actividad física regular mejora la salud del cerebro y reduce el riesgo de deterioro cognitivo. Trate de hacer al menos 150 minutos de ejercicio de intensidad moderada por semana, o 75 minutos de ejercicio de intensidad vigorosa.
Coma una dieta saludable: Una dieta rica en frutas, verduras y granos integrales y baja en grasas procesadas y no saludables puede ayudar a reducir el riesgo de desarrollar la enfermedad de Alzheimer. Algunas investigaciones sugieren que la dieta mediterránea, rica en pescado y alimentos de origen vegetal, puede ser particularmente beneficiosa para la salud del cerebro.
Mantente mentalmente activo: Participar en actividades mentalmente estimulantes, como leer, resolver rompecabezas y aprender cosas nuevas, puede ayudar a mantener el cerebro en forma y puede reducir el riesgo de desarrollar la enfermedad de Alzheimer.
Dormir lo suficiente: El sueño adecuado es importante para la salud en general, incluida la salud del cerebro. Apunta a 7-9 horas de sueño por noche.
Manejar el estrés: El estrés crónico se ha relacionado con un mayor riesgo de deterioro cognitivo y enfermedad de Alzheimer. Considere encontrar formas de controlar el estrés, como la meditación, el yoga o hablar con un terapeuta.